Arjona se dedicará a su fundación benéfica "al cien por ciento" desde enero

El cantautor guatemalteco Ricardo Arjona reveló hoy que a partir de enero de 2008 se dedicará "al cien por ciento" a su fundación benéfica Adentro, que fomenta la actividad artística en grupos desfavorecidos de su país.

"Con la firma de los tratados de paz en Guatemala (1996) nadie tomó en cuenta que a la gente que se le quitaban las armas de las manos no se le ponía nada", dijo el artista en un encuentro de corte íntimo en la capital mexicana con medios de comunicación.

"La idea es que esas manos pudieran ser ocupadas por instrumentos musicales, por un pincel", declaró Arjona, quien añadió que él no puede incidir sobre temas como vivienda o trabajo "porque para eso están los presidentes".

El cantante, que promociona su último álbum, el recopilatorio "Quien dijo ayer", con versiones de sus éxitos, contó que "ya hay grupos indígenas que están tocando canciones".

En un futuro le gustaría expandir la actividad de Adentro a México, por algunas acciones que ha venido realizando sin hacerlas públicas, dijo.

Arjona no quiso poner fecha respecto a un nuevo disco con temas inéditos, pero dejó entrever que quizás a finales de 2008 haya reunido composiciones para ello.

El cantautor, que departió largamente con los medios de forma muy cercana y abierta, se mostró muy satisfecho con la reinvención de sus temas clásicos y por los duetos que incluye su último disco, lanzado en agosto, con tres temas inéditos "robados" a un futuro trabajo.

Afirmó que quiso desentenderse de la producción y dejar que otros hicieran los arreglos de sus canciones, para él presentarse fresco y poder sorprenderse ante el micrófono.

"Es como comprarle ropa nueva y acicalar a un tipo viejito y sacarlo de nuevo a competir", opinó el intérprete.
Entre las colaboraciones destacó las del italiano Eros Ramazzoti, el puertorriqueño Marc Anthony y la banda mexicana de ska Panteón Rococó.

Además de ellas, en el disco también participan la española Marta Sánchez y el argentino Sandro.
"Yo voy buscando divertirme, hacer cosas que me suenen bonito a mí, a la larga es la única manera de encontrar cómplices", dijo respecto a su forma de componer.

"Sé lo que es sufrir y pasar tres meses sin escribir dos líneas, pero también hay días que he escrito dos o tres canciones", continuó.

Arjona se mostró poco partidario de encerrarse en géneros y defendió que cada artista tiene una tendencia a la repetición, "porque eso es lo que aprendiste y lo que sabes".

El artista definió también a los cantautores como "irrespetuosos de la música, porque se saltan todas las normas musicales en favor de lo que quieren expresar con sus letras".

También agradeció que pasara cuatro años como "vagabundo" en Ciudad de México, rechazado por las discográficas y escribiendo para otros, porque si hubiera tenido éxito a los pocos meses de su llegada "hubiera perdido muchas imágenes".

El intérprete de "Si el norte fuera el sur" habló distendido de sus aficiones, como la pintura y la fotografía.

A este respecto, relató que cuando le dio "el ataque" por las fotos salió a la calle a hacer series fotográficas y descubrió que "a la gente no le gusta nada que le tomen fotos".

Su primera serie iba a ser sobre limpiadores de coches, pero afirmó que le fue tan mal que abandonó a los dos días.
Con su siguiente intento, sobre las tiendas de ultramarinos enrejadas, tuvo más suerte, pero hubo de hacerse con un teleobjetivo para sacar fotos desde lejos.

ciudadenvivo/EFE